La
palabra Gral no corresponde a ningún lenguaje occidental sino que es una
deformación del árabe, pues originalmente se escribía sin vocales tal como
fuera descrita en texto cuneiforme. De la traducción al árabe que llegó a
Europa se le agregó al GRL las vocales quedando finalmente como GRAL.
Aunque
comparándola con la escritura cuneiforme, es preciso decir que la traducción
más exacta sería GARIL, siendo esta la forma conocida por la ciencia secreta de
los templarios en la edad media, tal como les fuera entregada la información
por Hassan Ibn Sannah, a quien llegara de los acadios (Babilonios) y cuyo nombre
significaría algo así como el calor de Dios o la luz de Dios, Gar-IL.
De
esta segunda piedra, se corre el rumor, que los templarios estaban en posesión
del Grial, información esta que se puede encontrar en el “pequeño libro de la Orden Oculta de los Caballeros
Templarios”, y de alguna manera es ratificada por Wolfram von Eschenbach quien
relata en su Parzival que eran los "Templeisen" quienes protegían la
piedra caída del cielo en la
Munsalväche (Untersberg?).
Este
Libro de la Orden
también revela que esta piedra se guardaba en el Cáliz utilizado por Cristo en
la última cena.